lunes, 28 de enero de 2008

Desventuras de los Pels en la ciudad

Sobre nuestra noche en La Cigale
(afiche realizado por Kioskerman)

15:00 hs.
Matías llega media hora antes de lo pautado a la casa de mauma para recibir al flete con su fletero, que también llegan media hora antes de lo pautado.

16:00 hs.
El flete, su fletero, y Matías llegan a La Cigale. El fletero cobra $30 más de lo pactado.

16:40 hs.
Matías va al baño.

17:00 hs.
Llega mauma y saluda a Matías.

17:15 hs.
Mauma intenta ser amistoso con el staff del lugar.

18:15 hs.
Llega Tingo a La Cigale y no encuentra nadie conocido dentro. Llama al celular de Mauma, y acuerdan encontrarse en la plaza del Luna Park Tingo, su hermano, y su amiga foránea deciden entrar a un bar y pedir una cerveza.

18:35 hs.
Matías, Mauma, Tingo, su hermano, y su amiga foránea comparten humos en la plaza

18:42 hs.
Tingo decide buscar algún rincón oculto para poder orinar. A mauma lo abordan un grupo de adolescentes marginales, que le dan tregua.

18:44 hs.
Regresa Tingo de su vuelta sanitaria, y es advertido de la situación. El grupo decide irse, y los adolescentes marginales desesperan por despedirlos. Los saludan, le dan lo suyo, y se van.

19:01 hs.
La Cigale. Allí dentro, y a esa hora, todo es frío, snob, y aburrido. Tingo deja un cartel para Diego, sujetado por las cuerdas de la telecaster que dice: “estamos en la calle, llamanos al celular” Deciden ir a otra plaza: San Martín.

19:16 hs.
En medio de una calle muy transitada, cual boca de hormiguero, Mauma dice: “ahí esta diego!”. Y Ego con su estilo característico, despreciando la gigante casualidad de encontrarse en medio de una gran ciudad, gesticula: “¿donde estaban, boló?”

19:18 hs.
Mauma compra una cerveza

19:23 hs.
Los pels, el hermano de tingo, y su amiga foránea miran una exposición de gigantografías en la calle. Ríen con una de ellas (http://www.fotolog.com/_theego_/23957205)

19:29 hs.
Algunos se sientan rodeando un árbol, otros parados. Toman la cerveza del pico, y conversan. Se acerca un marginal, pero esta vez ya no adolescente, y en un esfuerzo por conjugar las palabras les pide un trago de cerveza. Uno le dice que espere. Que luego de que todos beban, él podría irse con lo que quedaba y beberlo tranquilo. Al marginal, no le gusto la idea, y talvez se sintió discriminado. Y dijo: “no tengo sida”. Pero si tenía mugre. Y la verdad que no resultaría grato beber después de él. Pidió el ticket del envase porque también quería canjearlo por una moneda. Pero algunos le dijeron que no, otros que si, y el pobre hombre se fastidió, y se alejó a paso borracho. Luego regresa, y en un esbozo de canto y baile repite: “¿alguna vez te partieron una botella en la cabeza?”. Uno se puso casi en guardia, totalmente dispuesto a regañarlo si intentaba alguna locura. Otro se paro, y le saco la botella, recuperando de esa manera su seguridad, y su dinero en canje. El marginal señalaba a uno y decía vos sos malo, y ellos son buenos.

19:52 hs.
“¿Vamos?” dijo uno.

19:52 hs.
“Vamos” dijeron todos.

20:15 hs.
Hugi..s. 10 latas de ½ litro de cerveza, y 1 pizza grande.

21:21 hs.
“¿vamos?” Y emprendieron el camino de regreso a La Cigale. Entraron. Seguía como antes, pero se quedaron. Tingo toma 2 fotos. Diego muestra al hermano de Tingo toda su colección de discos dentro de su IPod. Mauma revisa minuciosamente una cámara de fotos semi-profesional de la amiga foránea del hermano de Tingo.

21:50 hs.
Poco a poco en el bar la gente va entrando y se esparce en las mesas.

23:00 hs.
Afuera, los Pels a punto de entrar, hablan entre ellos, saludan amigos. Dentro del bar la cantidad de gente supera las expectativas. Ya todo pareciera estar listo. En la imaginación colectiva se escuchan las masas agitar para que el show comience. Miles de chiflidos, gritos, golpes, desmayos… etc.

23:05 hs.
Gustavo, quien pareciera ser el que posa en la punta de la pirámide, se acerca a nosotros, y con un gesto mas que amable, nos invita a entrar y dar comienzo.

23:07 hs.
Los Pels rayan y atraviesan el salón, con la frente baja para evitar miradas. Suben a las tablas, enchufan, saludan, y largan. Las chicas de las proyecciones están listas también. Y lo hacen bien. La voz se escucha como nunca... y eso a Tingo le produce una sensación de entusiasmo e inhibición a la vez. Las cosas salen bien. Los Pels se divierten tocando.

23:20 hs.
Matías rompe una cuerda. Tingo llama a Paco, que portaba una guitarra de repuesto. En el tiempo que tardó Paco en traerla, y Matías en cambiarla, Tingo intento comunicarse con el público, agradeciendo el haber ido, agradeciendo a Gustavo, y saludando a su nuevo ídolo, el dibujante/historietista: Kioskerman. Acto seguido, conformados transitoriamente en trío, suena Malas Compañías.

23:40 hs.
Todos aplauden, y los Pels olvidan en ese instante cualquier malestar, disconformidad, tristeza o frustración. Saben, que una vez mas, ocurrió el error: mucha gente aplaudiendo, felicitando, gente moderna, vestida a la moda, chicas lindas, chicos lindos, mods, extranjeros, algunos mas viejos, otros mas pendejos… todos aplauden algo que para ellos, los Pels, es íntimo, simple e infantil. Tan simple como juntarse, y tocar.

La noche siguió, y pasaron muchas cosas divertidas, que prefiero guardar. Matías se esfumo con su chica, Mauma cargo parte de la batería y 2 chicas en su Delorean. Tingo y Ego, volvieron tranquilos hablando de teléfonos celulares, marginalidad social, y pautando algún almuerzo cualquier mediodía cercano.