viernes, 2 de mayo de 2008

Bajo tierra


Empezó un otoño mas.
Siempre, para estas épocas, tengo la sensación de estar entrando en una madriguera.

Empieza el momento en donde se produce a puertas cerradas; en donde se siembra a escondidas, y se cosecha en la madura primavera.

Otoño, invierno, son las estaciones en donde se vive la vida. Donde buscamos las ropas que siempre nos sorprende volver a usar. Son las estaciones en donde se crece realmente, se envejece. Porque al salir de la cueva, estamos con las pupilas dilatadas, la piel blanca, y la experiencia acumulada.

A nosotros el otoño nos encontró, haciendo cosas que no hubiéramos pensado, como por ejemplo estar en una plaza céntrica, los 4 paraditos frente a una cámara de MTV respondiendo preguntas, y luego posando, o caminando en fila. – Caminen con onda – nos decían, y Mauma que encabezaba la fila empezó a mover los hombros de manera espástica. – Sentate en ese escalón – le dijeron a Eggo, quien por lo bajo me comento: - se van a notar mis medias de diferente color. – Ponete en cuatro! – le dijimos a Mati cuando posaba en la escalera, - y arqueá la espalda! – y Mati muy obediente acataba las órdenes.

También nos llamaron de la revista mensual Wipe para entrevistarnos, y allí estuvimos con unas chicas muy buena onda, que se coparon y nos hicieron una entrevista muy divertida.

Este otoño también nos sorprende grabando una especie de GREATEST HITS que decidimos hacer para promocionar un poco la banda. La idea es grabar los que creemos que son los temas más resonantes de todos los tiempos. Para ello elaboramos un sistema muy salomónico en donde cada uno postulaba su lista de – predilectos – y luego consolidábamos las 4 listas sacando las coincidencias (alcoyana alcoyana).

Tarea más que difícil. Para mí fue como que me digan: tenes que elegir uno de tus dos hijos para irte de vacaciones. Tristísimo.

Pero finalmente en eso estamos, a la espera de lo que sería un 1º disco para la mayoría, pero un compilado de viejos y nuevos temas, para nosotros.

Bien. Hasta acá llega mi crónica.


Les deseo una reservada y sombría temporada otoño/invierno 2008.

Best Regards.