miércoles, 26 de marzo de 2008

Tremendo!

Perdón, te ilusioné
no supe poner este freno
que ahora piso débil.
Con tantas ganas de soltar y correr,
y abrazarte. Siento tanta decepción.
Hoy no pude despertar, por tanta ansiedad
sigo preso. Mi jaula es esta gran ciudad,
que me ignora mas y pretende que me haga viejo
agachando la cabeza.
Y ahora vez que todo el tiempo te imagino
maquillándote con gotas de este vino,
te vas a dar cuenta en un segundo
que seré tu fracaso preferido.

1 comentario:

Malvina dijo...

"te vas a dar cuenta en un segundo
que seré tu fracaso preferido."

Es así nomás. Siempre existirá el fracaso preferido quien, tal vez, antes fuera el amor preferido.

Quién sabe de qué va todo esto, ¿no?